domingo, 13 de noviembre de 2022

Apotegmas de los padres del cemento (4)

En cierta ocasión, un maestro de novicios mando a uno a ayudar en la cocina. Aquel día el monje encargado de ésta estaba preparando una sopa de cebolla. Indicando el montón, le dijo al novicio que las picara. Éste, que no había cocinado en su vida, le preguntó cómo se hacía. El viejo monje le dijo: «Limítate a picar. El resultado déjalo en manos de Dios».

1 comentario:

RockyMarciano dijo...

Quiso un novicio
dominar las cebollas
y aprendió lágrimas.


Un abrazo y que Dios lo bendiga, don Alfonso.