jueves, 8 de enero de 2009

¿Qué prefieres: realidad o etiqueta?

Hoy me remito al artículo homónimo en Libertad Digital. Si tenéis algún comentario, podéis dejarlo aquí.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Si. Es un problema de conversión.

¿Creemos de verdad lo que profesan nuestros labios?

La fe vivida es la mejor manera de dar a conocer a Jesús a los demás.

Anónimo dijo...

"Hame parecido es menester como cuando los enemigos en tiempo de guerra han corrido toda la tierra, y viéndose el Señor de ella apretado se recoge a una ciudad, que hace muy bien fortalecer, y desde allí acaece algunas veces dar en los contrarios, y ser tales los que están en la ciudad, como es gente escogida, que pueden más ellos a solas que con muchos soldados, si eran cobardes, pudieron, y muchas veces se gana de esta manera victoria; al menos, aunque no se gane, no los vencen; porque como no haya traidor, si no es por hambre, no los pueden ganar. Acá esta hambre no la puede haber que baste a que se rindan; a morir sí, mas no a quedar vencidos" (Santa Teresa)

Giocondo dijo...

lo que es cierto es que los que hemos tenido una educación religiosa en la infancia hemos desarrollado estrategias de etiquetación muy anticristianas , los verdaderamente cristianos son los nuevos descubridores , es un don que Dios les dá , no hay más explicación , no es que la gente crea o no en las cuestiones fundamentales , es que aunque crea , existen patologías y deformaciones insuperables para nosotros, luchas internas apagadas a jarros de agua fría, y muchos mártires de sus ideas , en lugar de mártires para la gloria de Dios.
Es el efecto Kiko Argüello , así lo llamo yo porque es descubrir la fe dentro de la etiqueta . Es que no es incompatible , uno puede ser y etiquetarse y subrayarse y otros son lo mismo y se etiquetan de lo contrario , pero tiene más fe el que declara no tenerla . Esa es mi opinión